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LLENARSE DE PAZ Y TRABAJAR POR LOS DEMAS: DE MIERCOLES DE CENIZA, CUARESMAS Y SEMANAS SANTAS FUTURAS

Hoy es Miércoles de Ceniza.

Hoy es Miércoles de Ceniza. Atrás quedó el carnaval que vía ordenanza de 1816 -del gobernador Casimiro Marcó del Pont- no se festeja en Chile.

Los cristianos, y en especial los Católicos celebramos a nivel global el arranque de la Cuaresma.


Es tiempo de reflexión, de ayuno de barbaridades, y abstinencia de impertinencias.


Ha existido mucha doctrina, órdenes y barbaridades e impertinencias en la misma historia de la religión, que le ha quitado a estas fechas su brillo interior, haciéndolo un tema odioso por lo reglamentario, cuando debe ser algo de Dios en nosotros, a nuestra pinta, en diálogo profundo, meditando los misterios del amor al bien supremo hecho carne que entrega hasta la vida por encarnar y heredar ese amor en la uña y carne del prójimo, y su vida junto a la nuestra, la de todos, la de cada uno de los cada unos.




Este año es especial en dicho sentido. La guerra nos invita, naturalmente, a realizar faenas espirituales que nos atacan con cariño desde el fondo del alma y nos hacen natural el ayunar y abstenernos como un acto de amor hacia el Cristo que camina hacia la cruz y penetra en su legado glorioso al demostrar nuestra capacidad de resucitar en el amor, por el amor y gracias al amor y su creador.


Así es como la guerra se supera, y así es como se hace llevadera.


Los humanos lo aprendimos con dolor en un Miércoles de Ceniza en el que los aliados presionaron, desde la víspera en Dresden, matando a más personas en un solo bombardeo secuencial que a todas las personas que el ejército nacional socialista de Hitler había matado durante toda la guerra en Londres. https://www.churchtimes.co.uk/articles/2005/11-february/features/ash-wednesday-1945


Hoy tenemos la oportunidad de demostrar, como humanidad, nuestra capacidad de hacer un alto al fuego, como se hizo no tanto en alguna semana santa, sino en alguna navidad durante la primera guerra mundial: "La tregua «surgió entre la tropa» pese a los edictos «anticonfraternización», dice el historiador Stanley Weintraub, en cuyo libro Silent Night cuenta la historia. Tras vocear promesas como «Tú no disparar, nosotros no disparar», algunos de los hasta entonces enemigos se deleitaron mutuamente cantando villancicos que sustituirían al silbido de las balas". https://historia.nationalgeographic.com.es/a/tregua-navidad-primera-guerra-mundial_8801


Hoy es tiempo en el que los humanos estamos invitados a llenarnos de paz y trabajar, aún a pesar de la guerra, por los demás.


Hoy es Miércoles de Ceniza.


Que nuestro ayuno sea de balas y escupitajos virtuales.


Que esta sea la primera de nuestras nuevas cuaresmas en paz y libertad, como forma de lograr que todas nuestras siguientes semanas tengan algo de santidad en el futuro.

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