EL ENCUENTRO CON LA HISTORIA
Cuando éramos pequeños, en Ecuador, el cuadro de medallas que hoy observamos a cada amanecer los Latino-Americanos era imposible.
De hecho, mirábamos a Venezuela como una potencia de Sud-América, y un país que peleaba los primeros lugares de los juegos Panamericanos, y tenía medallas de oro conseguidas y comentadas en casa, como la de Francisco Rodríguez, "Morochito", en México 1968, hecho que se comentaba con curiosidad, al haber llegado a Venezuela y haber sido recibido por la gente en la pista del aeropuerto, en una verdadera invasión que casi no le permite aterrizar en su suelo patrio.
Hoy Ecuador tiene una medalla menos que Venezuela, e igual número de medallas que Colombia, República Dominicana, y México, y dos medallas más que Puerto Rico y Argentina, cuatro menos que Cuba y claro, siete medallas menos que Brasil, países con quienes empata en medallas de oro, lo cual le coloca 21 a Ecuador, por su peso en oro, a solo tres lugares de un Brasil y dos de Cuba, colocados ambos en el top 20 del mundo.
Países con muchos más recursos, como Chile, no aparecen en el medallero, y es que como dice el artículo que escribo, no todo es dinero, sino que mucho de lo que ocurre en la realidad es una cuestión de fe y de proceso centrado en la fe en el ADN@+, incluido el reencuentro entre razas y la apertura al mundo con la misma humildad con la cual el vino Chileno ha conquistado el mundo: con la fe en su industria y una organización detallada en torno al precio, la calidad, y la competitividad.
LA FE Y SU VALOR EN ORO
La fe tiene dos lados, uno positivo y otro no tanto: te ayuda a despreocuparte, y por otro lado, te ayuda a despreocuparte... En todos los casos, la fe nos ayuda a enfocarnos.
En el caso de Chile, la actual juventud no se está destacando en el deporte, aunque sí quema iglesias por deporte.
En ello, siguiendo el ejemplo de la pasada juventud Venezolana, que se metió en una quebrada por 30 años, lejos del capitalismo, comienza a dar visos de entrar en una espiral de alejamiento de su historia olímpica, en la cual ha logrado trece medallas en total: dos de oro, siete de plata y cuatro de bronce: una menos de oro que las históricas de Ecuador, pero 6 más de plata y 4 más de bronce.
De pequeños escuchábamos las historias de un Chile que fue el primer país de América Latina en competir en las olimipiadas modernas, en Atenas, a fines del siglo 19. Ya luego, al ser residentes permanentes en Chile, vimos la gloria con Nicolás Massú y Fernando Gonzáles, y sus medallas de Oro en el maravilloso Tenis Chileno de Atenas 2004 y Pekin 2008; ese que hoy se necesita para devolver las voleas de la vida que vienen de la mano de una juventud que se desenfoca y genera grietas con violencia en lugar de glorias con fuerza.
LA LOGICA CIRCULAR DE LA FE
La lógica circular de la fe permite pensar en lo que hace hoy Ecuador: expresar verdades como aquella que dice que si un problema tiene solución, ya no es un problema, e igualmente, si no tiene solución no es un problema: hay que pensar en el capitalismo de dicha forma; no es un problema, es la solución. De hecho, debemos pensar que la libertad no es un problema, es LA solución.
Ecuador, hace poco, ha recuperado la libertad y ha votado democráticamente por el capitalismo social de mercado, dejando atrás el socialismo de derechos de estado. Ha ido a las urnas con fe y luego de luchar en aeropuertos y votar en los colegios, ha recuperado sus instituciones, ha ido a misa, se ha limpiado su mala energía, y ha enviado a su mayor y mejor equipo histórico a las olimpiadas, logrando hasta el momento dos medallas de oro y una de plata.
Esto lo ha logrado de la mano de un equipo público-privado Ecuador-INEOS (UK) bajo el liderazgo de Richard Carapaz, del Carchi, y de la mano de un equipo Ecuador-Ecuador bajo el liderazgo de un proceso comenzado hace más de 30 años, asociado a nombres de exiliados rusos que buscaban la libertad y escapaban del comunismo, como Burov e Ignatov, este último radicado en Pastaza, de donde es Neisi Dajomes.
Al día de hoy, Ecuador tiene tres campeones Olímpicos y dos Sub-campeones Olímpicos: Jefferson Perez, Richard Carapaz y Neisi Dajomes, y el propio Jefferson Perez y la más reciente sub-campeona olímpica Tamara Salazar, en halterofilia, como Neisi Dajomes, pero siendo Tamara del Carchi, como Richard. El Oriente y la Sierra de Ecuador se llevan las preseas, desde el Carchi hacia el Azuay, pasando por Pastaza, con gente que mira a diario a la Montaña y sabe subirla y vencerla con fe y con un plan diario y enfocado: subiéndola desde Occidente hacia Oriente, y viceversa.
LA FE MUEVE MONTAÑAS
Quizá en Chile, el tener una montaña que es inaccesible sea parte de la cultura que hay que recuperar, para seguir subiendo cerros como parte de la identidad, recuperando con la juventud el valor del rigor, ese que implica el clima y el Sur extremo, el frío, el invierno, la nieve, y el mar, ese en el cual la armada entra con fe y respeto, esas dos cualidades que hicieron grande a Chile y que hoy por hoy deben reencontrarse con lo Mapuche y con el rigor del mercado, de la academia, del estudio, y de la disciplina que hizo grande a Chile y de recuperarse lo más pronto posible, con fe, hará que este capítulo de los dos últimos años, pase solo a ser una curiosidad histórica, y no se convierta, como en Venezuela, en su peor pesadilla histórica.
Como en la montaña, en el deporte y en la sociedad: actuar con fe y con un plan es fundamental. De dicho modo se evitan los problemas sin solución y se encuentran las soluciones a los verdaderos problemas identificados, de modo de seguir la ruta óptima, evitando caer en las quebradas de la vida, o entrar en las grietas de los nevados, saliendo en la competencia de sucumbir ante los puntos fuertes de los rivales, o en entrar a dar vueltas sobre las imposibilidades técnicas que pueden generar daños y pérdidas personales, privadas y sociales.
LA FE Y LA MONTAÑA COMO MAESTRAS DE VIDA
Ecuador no solo que ha pasado ya por su pesadilla que gracias a su dolarización y su ADN@+ ha durado solo una década; hoy, se ha colocado ya sólidamente en el lugar 21 del mundo, con sus entrenadores, federaciones provinciales, deportistas, comités, equipos, y claro, talentos únicos cultivados a partir de su rico ADN@+ que se ha fortalecido por varias décadas de décadas, en masa, y le ha colocado, tras un proceso iniciado en los años 70s y 80s, fortalecido en los 90s, y 2000s, y soportado durante los 2010s, para llevarlo a los 2020s como el país más potente en lo deportivo junto a Cuba, en Hispano-América, al momento y el tercero detrás de Brasil en Latino-América e Ibero-América, así como Top 5 de América Continental y el Top 1 de la América del Sur Andina y del Pacífico.
El deporte es salud. Que el deporte nos siga enseñando el valor del entrenamiento y la disciplina, como la del montañista que sube cerros, y se forma para trabajar en equipo, sin quemar pajonales, haciendo misa en reencuentro con la fe, y apoyándonos, en diálogo entre razas y entre diversos, como hace Brasil, como hace Estados Unidos, como hace China, como hace Ecuador, y como hacen todos los países que, como Italia, sacan lo mejor de su ADN@+.
ORGANIZARSE CON FE ES COMENZAR A VENCER CON LIBERTAD
Trabajemos través de todas las diversas organizaciones: públicas, privadas, de sociedad, incluso mini-comunitarias, para que nuestros jóvenes sean mediatizados y sus casos de éxito sean estudiados de forma orgánica, sean comunicados y se vuelvan tendencia en redes, sean apoyados por la masa en sociedad, y se muestre que se puede tener fe en el deporte y la educación, para llegar a ser lo mejor del mundo libre y compatibilizar con la fe de nuestros mayores: de quienes eligieron vivir en libertad escapando de la organización totalitaria de sus tiempos en cada uno de nuestros países.
De todas formas, falta mucho por hacer en Ecuador, Chile y el resto de América para alcanzar el nivel de Estados Unidos y China en lo deportivo, y el de Estados Unidos en lo general:
De todas formas, la libertad camina fuerte y destruirá poco a poco la oscuridad, sobre todo si caminamos con la fe, esa eterna movilizadora!
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