Este 5 de Febrero los Ecuatorianos podemos darle un SÍ a la LIBERTAD.
La Democracia dirá, por medio del voto, si la libertad pesa lo suficiente.
El futuro depende del "Sí" democrático y libre.
Poder caminar por las calles, poder viajar, poder salir en las noches, poder estar tranquilos cuando los seres queridos están fuera de la seguridad del hogar.
Poder conducir un auto con tranquilidad. Poder disfrutar del fruto del trabajo. Poder estar un poco distraídos y no siempre en estado de alerta en las calles. Poder invitar a turistas a recorrer nuestra ciudad.
Poder confiar que algún político haga un milagro porque podrá tener herramientas para combatir la corrupción desde adentro, con poder cedido por la población hacia el mandatario. Poder confiar que algún político haga otro milagro porque podrá tener herramientas para expulsar a las mafias hacia afuera, con poder dado por los mandantes hacia el estado.
Creer que el imperio de la ley puede depender de un parlamento que puede tener debilidades, pero que será democráticamente electo, para cumplir con sus roles legislativos, fiscalizadores y nominativos, como primer poder del estado que debe ser, por ser un reflejo real de lo que es el país, pero debiendo tener que elegir a los mejores, pocos buenos, para que no ingresen sujetos no aptos para cumplir un rol positivo que libere y cree.
Poder coordinar desde fiscalías en lo internacional, para poder cooperar eficientemente con países que poseen sistemas de inteligencia para combatir las mafias transnacionales en tiempos en los cuales la libertad se juega frente al totalitarismo falaz vestido de populismo y de distribución de la renta, sin generar incentivos para el crecimiento de los capitales varios en favor de los trabajadores todos.
Poder cuidar efectivamente del agua y poder hacerlo en comunidad, pudiendo recibir el merecido pago asociado a los servicios que las nacionalidades y pueblos entreguen junto con los campesinos y los huertos urbanos, las industrias responsables, y los barrios de clases educadas y no educadas, en favor de la ciudad, la tierra, el agua, la naturaleza, y la vida más allá de lo humano.
Se vota en favor de la libertad, del futuro, de la seguridad, de la confianza, de la justicia, del orden, del crecimiento, de la verdadera distribución, de la sostenibilidad, y sobre todo, del empoderamiento de la comunidad en la sociedad.
Se vota sí por el futuro en Ecuador. Se sigue saliendo adelante, gane o pierda el Sí. Se saldrá más rápido, más temprano que tarde, eso sí, si gana el sí. Por ello, y sin mediar nada más que el amor por el país, el futuro tiene este 5 de febrero un único plan positivo: el Sí.
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